Receta de muslos de pollo al ajillo con thermomix. Paso a paso con trucos y detalles que harán de este plato una comida digna de estrellas michelín
Muslos de pollo al ajillo con Thermomix
Hoy vamos a preparar unos deliciosos muslos de pollo al ajillo con thermomix donde aprenderemos además varios trucos para que queden deliciosos, suaves y muy jugosos, así que muy atenta y no te olvides de llegar hasta el final de la receta.
Prueba también nuestra receta de curry cremoso de pollo en la Thermomix
Receta de Muslos de pollo al ajillo con Thermomix
Ingredientes para hacer Muslos de pollo al ajillo con Thermomix
Preparación de Muslos de pollo al ajillo con Thermomix
Ponemos los muslos de pollo en un recipiente que tenga tapa y echamos el medio litro de leche junto con una cucharadita de vinagre de vino blanco o zumo de limón, removiendo con cuidado para que llegue a todas partes. Pondremos la tapa y llevaremos a la nevera por al menos 3 horas - yo lo dejo desde la noche anterior, de esta forma se ablandará el pollo y quedará mucho más jugoso.
Pasado este tiempo, descartamos la leche que ahora debería ser suero y proseguimos con la receta.
Ponemos los 6 dientes de ajo y 100 gramos de aceite de oliva en el vaso de la Thermomix y troceamos durante 5 segundos a velocidad 7. Bajamos el ajo que pueda haber quedado adherido a las paredes del vaso, que no será mucho, ya que al trocearlo con el aceite este resbala.
Sofreímos 10 minutos a 120 °C a velocidad 1.
Espolvoreamos los muslos de pollo con la sal, la harina y la pimienta y los vamos a sellar en una sartén con los 50 GR restantes de aceite de oliva. Deben de quedar dorados, debemos irles dando la vuelta hasta conseguir el color que buscamos.
Si tenemos él cubre cuchillas, colocamos este en su posición, si no lo tienes no pasa nada.
Ponemos con cuidado los muslos ya dorados en el vaso de la Thermomix junto con los 150 GR de vino blanco y la pastilla de concentrado de pollo, programando 30 minutos a temperatura varoma, giro inverso, velocidad cuchara.
Vertemos el contenido del vaso en una fuente, para finalizar con un chorro de zumo de limón recién exprimido y el toque de perejil que espolvorearemos sobre los muslos de pollo. Servir inmediatamente.
El gran truco de esta receta es cómo te lo puedes imaginar, el proceso de marinar los muslos con suero de leche – es ideal siempre que trabajes con pollo hacer este paso, ya que va a conseguir una textura suave y muy jugosa, este es un secreto que utilizan mucho en la cocina de restaurantes por su resultado espectacular.
Echa un vistazo a nuestra receta de patatas a lo pobre como acompañante para estos ricos muslos de pollo al ajillo que acabamos de preparar.
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