Roscos de vino y aceite de oliva

Antes de comenzar el proceso de elaboración, es necesario precalentar el horno a una temperatura de 180º C.

Ponemos en el vaso el azúcar blanca refinada, el vino, el aceite de oliva, la levadura, el anís en forma de semillas y la sal y la harina. Programamos 20 segundos a velocidad 5.

Espolvoreamos una cantidad de harina sobre la superficie de trabajo y colocamos la masa encima. Compactamos la masa usando nuestras manos hasta obtener una forma redonda y sólida similar a una bola.

Tomamos pequeñas porciones de masa, de tamaño similar a una nuez grande, y las moldeamos para darles forma de rosquilla.

Cubrimos únicamente un lado de las rosquillas con azúcar integral de caña y las colocamos en una bandeja apta para horno, ya sea sobre un tapete de silicona o una hoja de papel de hornear. Aseguramos que la parte cubierta de azúcar quede hacia arriba.

Procedemos a hornear las rosquillas a una temperatura de 180ºC durante aproximadamente 20 minutos, o hasta que estén completamente cocidas según nuestro criterio visual.

Una vez retiradas del horno, dejamos que se enfríen antes de consumirlas.